Mirar para otro lado

En la Calabria en que se ha convertido el país vasco, y más concretamente, el Corleone en que ha devenido Andoain, nadie ve ni oye nada. La especialidad local es que los asesinatos y las acciones de los matones te cojan siempre mirando para otro lado. Dicen que para que triunfe el mal, sólo hace falta que las personas de bien miren para otro lado. Gracias Joxeba por mirar de frente y por no transigir ni consentir. Estremece siempre, como el primer día, volver a leer tu historia, tu injusticia.

No es, me temo, un buzón lo que necesitaría Andoain, sino un gigantesco cubo donde depositar el pus que una sociedad enferma ha ido acumulando y acumula todavía, en un gigantesco abceso que muchos fingen no ver. Ojalá que esta iniciativa sea la aguja que rompa la enrojecida piel y abra aunque sea un solo poro por donde empiece a supurar la infección.